COLUMNA SERPIENTES EMPLUMADAS Y ESPEJOS HUMEANTES 26
Nuevos descubrimientos en la Pirámide del Sol en Teotihuacan.
Si bien la Pirámide del Sol es una de las estructuras arqueológicas más importantes del mundo, hasta la fecha en realidad se contaba con poca información. En el momento de u restauración por Leopoldo Batres, él reporta varios entierros de infantes en las esquinas de los varios cuerpos de la pirámide. En el siglo XX se encuentra la cueva que se encuentra debajo de esta, ampliando nuestros conocimientos de su significado ritual vinculado intimamente con la concepción del cerro y la cueva en el México Antiguo. Algunos autores proponen que una especie de canal alrededor del monumento tal vez tuvo agua.
El día de hoy los arqueólogos del proyecto presentan los resultados de recientes excavaciones al interior de la pirámide, aprovechando un tunel excavado en los años treintas. Los descubrimientos son sobresalientes. Una ofrenda colocada al momento de la inauguración de la construcción con piezas de obsidiana y tres ejemplares de piedra verde, 11 vasijas tipo Tlaloc, siete osamentas humanas y las de un felino, un cánido y un águila. Entierros similares se encontraron hace poco en la Pirámide de la Luna. La interpretación de estos elementos nos permitirá acercarnos más a una de las culturas más complejas y sofisticadas de la Antigüedad. Estos elementos rituales fueron colocados ahí hace aproximadamente dos mil años, y estan intimamente asociados al origen de Teotihuacan como centro urbano y cultural.
El corazón de la Pirámide del Sol nos descubre sus secretos, nos muestra su ancestral ritmo de palpitar… coyotes, jaguares y águilas, un gran espejo circular, puntas de flecha y los fragmentos de vasijas del Señor del Tiempo y la Lluvia.